Como otros han señalado en esta reunión, la defensa de la verdad histórica es fundamental para el trabajo del World Socialist Web Site. Nuestra práctica política se basa siempre en la asimilación de las lecciones del pasado. El arma más poderosa que tiene la clase obrera es el conocimiento de las experiencias históricas por las que ha pasado, para saber lo que ha ganado, lo que debe defender hoy y cómo debe luchar para lograr el socialismo en el futuro.
Desde la defensa de la Revolución Rusa y de León Trotsky contra las escuelas estalinistas y postestalinistas de falsificaciones históricas hasta la lucha contra la banalización de los crímenes nazis en Alemania, el movimiento trotskista ha estado, desde su fundación, a la vanguardia de la lucha por la verdad histórica.
El gran historiador de la Oposición de Izquierda, Vadim Rogovin, explicó que "Al igual que los mitos ideológicos, los mitos históricos son un producto de los intereses de clase inmediatos... Refutar estos mitos sólo es posible rehabilitando la verdad histórica, la representación honesta de los hechos reales y las tendencias del pasado".
Durante el año pasado, la lucha por defender la verdad histórica tomó una nueva forma: la defensa de las tradiciones revolucionarias de las grandes revoluciones democráticas en los Estados Unidos, la Revolución Americana y la Guerra Civil. Fue una sorpresa para muchos cuando el WSWS surgió en la vanguardia en la oposición al Proyecto 1619 del New York Times, una reescritura, de hecho la falsificación de la historia estadounidense, presentando la historia de los EE.UU. como una historia de conflicto racial.
De hecho, somos la única publicación que ha levantado alguna crítica al proyecto desde la izquierda. Esta confusión se basó en el hecho de que los principios genuinos del marxismo y el socialismo han sido tan distorsionados y tergiversados por la pseudoizquierda de la clase media, que es de hecho una antiizquierda.
Nuestra primera exposición en profundidad del proyecto se publicó el 3 de septiembre de 2019, sólo dos semanas después de que el proyecto se publicara con mucha fanfarria en una edición especial del New York Times Magazine. Desde el principio reconocimos que estaban en juego los más profundos temas teóricos y políticos.
La reescritura de la historia siempre está relacionada con los intereses políticos del presente. Como señalamos en nuestra exposición original, el objetivo del New York Times "es crear una narrativa histórica que legitime el esfuerzo del Partido Demócrata por construir una coalición electoral basada en la priorización de las 'identidades' personales, es decir, el género, la preferencia sexual, la etnia y, sobre todo, la raza". Por encima de todo, borra las luchas de la clase obrera de la historia americana.
Defendemos todo lo que es progresista en la historia. Entendemos la historia no como un cuento de moralidad, sino como la evolución de la humanidad a través del desarrollo de la lucha de clases. Entendemos que la clase obrera no puede conquistar nuevas alturas si no defiende lo que se ha ganado en el pasado. Y nos oponemos irreconciliablemente a todos los esfuerzos para dividir a los trabajadores por líneas raciales, nacionales o de género.
El marxismo hace mucho tiempo que ha dado cuenta de las limitaciones de la democracia burguesa, pero nunca ha renunciado a la lucha por la igualdad. El concepto progresista inscrito en las banderas de los revolucionarios burgueses de los siglos XVIII y XIX, de que "Todos los hombres son creados iguales", encuentra su expresión más avanzada hoy en el movimiento marxista.
Los Estados Unidos es el centro del imperialismo mundial. Su clase trabajadora se ha forjado a partir de innumerables nacionalidades y etnias de todos los rincones del planeta. El desafío de unir a la clase obrera en los Estados Unidos es esencial para la victoria del socialismo en todo el mundo.
Estamos orgullosos de haber proporcionado una audiencia masiva para los mejores académicos de la historia estadounidense, incluyendo a Gordon Wood, James McPherson, James Oakes, Victoria Bynum, Clayborne Carson, Richard Carwardine, Adolph Reed, Jr. y Dolores Janiewski, para que expresen sus críticas al Proyecto 1619. Todos ellos han dedicado el trabajo de su vida a la defensa de la verdad histórica y los principios de la erudición motivada democráticamente.
Debido al trabajo realizado por el WSWS, el Proyecto 1619 ha sido ampliamente expuesto. El material que hemos publicado, al que se puede acceder fácilmente gracias al relanzamiento del sitio, ha sido visto cientos de miles de veces por lectores de todo el mundo. Sobre todo, esta poderosa respuesta deja claro que los trabajadores de este país y de todo el mundo están profundamente apegados a la historia revolucionaria de los Estados Unidos —encarnada en la Declaración de Independencia y la lucha para aplastar la esclavitud dirigida por Abraham Lincoln en la Guerra Civil— así como a las monumentales luchas de las que surgió la clase obrera.
El relanzamiento del WSWS se basa en la comprensión de la relación entre el pasado y el presente. De hecho, en su propia forma está dirigido a establecer estas conexiones. El WSWS es en sí mismo un inmenso depósito de verdades históricas. Lo que el WSWS ha logrado en las últimas dos décadas debe ser llevado adelante y ampliado para armar a la clase obrera internacional para las luchas monumentales por venir.
(Artículo publicado originalmente en inglés el 1º de noviembre de 2020)