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Informe de apertura de la escuela de verano 2023 del SEP

León Trotsky y la lucha por el socialismo en la época de las guerras imperialistas y la revolución socialista

El siguiente informe fue presentado por David North, presidente nacional del Partido Socialista por la Igualdad de Estados Unidos (SEP, por sus siglas en inglés) y presidente del Consejo Editorial Internacional del World Socialist Web Site, para introducir la escuela de verano del SEP, que se llevó a cabo entre el 20 de julio y el 4 de agosto de 2023. Todas las conferencias están disponibles aquí.

1. Al inaugurar la Escuela Internacional de Verano 2023 del Partido Socialista por la Igualdad, deseo en primer lugar, en nombre del SEP en los Estados Unidos y del Comité Internacional de la Cuarta Internacional, rendir homenaje a la vida del camarada Wije Dias. Murió hace poco más de un año, el 27 de julio de 2022, a la edad de 80 años. Dedicó más de 60 de esos años a la construcción del movimiento trotskista en Sri Lanka e internacionalmente. Durante los últimos 35 años de su vida, más de un tercio de siglo, el camarada Wije ocupó el cargo de secretario general de la sección de Sri Lanka del CICI. Hasta el último día de su vida, permaneció profundamente involucrado en el trabajo de la sección de Sri Lanka y las luchas de la clase obrera.

Conferencia “León Trotsky y la lucha por el socialismo en la época de las guerras imperialistas y la revolución socialista”

2. Una revisión completa de la vida del camarada Wije sería más que la biografía de un individuo. Abarcaría necesariamente la historia moderna de la clase obrera de Sri Lanka y la del movimiento trotskista mundial. Se convirtió en trotskista como miembro del movimiento juvenil del Partido Lanka Sama Samaja (LSSP), que debido a sus décadas de lucha por el trotskismo se había desarrollado como un partido revolucionario de masas de la clase trabajadora de Ceilán. Pero en junio de 1964, como consecuencia de la influencia maligna del pablismo, y de su propia adaptación cada vez más evidente al oportunismo parlamentario a lo largo de una década, el LSSP repudió el programa socialista revolucionario del trotskismo y formó un Gobierno de coalición con el SLFP burgués dirigido por la primera ministra Bandaranaike.

Wije Dias dirigiéndose a la reunión del 80º aniversario de la Cuarta Internacional en Colombo en 2018

3. El camarada Wije estuvo al frente de una notable generación de jóvenes revolucionarios valerosos y con principios que se opusieron a esta traición y se dispusieron a reconstruir, en una lucha implacable contra los oportunistas del LSSP, el movimiento trotskista en Sri Lanka. A raíz del viaje de Gerry Healy a Colombo en junio de 1964, Wije y otros opositores a la coalición establecieron contacto con el Comité Internacional de la Cuarta Internacional. Las discusiones con Healy y las declaraciones del CICI denunciando la coalición colocaron la traición del LSSP en el contexto internacional más amplio y esencial de la lucha contra el revisionismo pablista desde 1953.

4. Los acontecimientos históricos en Sri Lanka tuvieron un profundo impacto en el desarrollo del trotskismo en los Estados Unidos. Siempre ha sido un motivo de orgullo del Partido Socialista por la Igualdad en los Estados Unidos que fue la respuesta principista por parte de los partidarios estadounidenses del Comité Internacional a la traición del LSSP en Sri Lanka lo que precipitó su expulsión del Socialist Workers Party (SWP; Partido Socialista de los Trabajadores) en septiembre de 1964 y la fundación del Comité Estadounidense por la Cuarta Internacional. Dos años más tarde, en noviembre de 1966, se estableció la Workers League (Liga Obrera) como sección simpatizante del CICI. En 1968, tras un largo período de clarificación política, se fundó en Sri Lanka la Revolutionary Communist League (RCL; Liga Comunista Revolucionaria). El camarada Keerthi Balasuriya fue elegido su primer secretario general, cargo que ocupó hasta su prematura muerte a la edad de 39 años el 18 de diciembre de 1987. Quisiera agregar entre paréntesis que el camarada Keerthi no solo me ayudó a escribir Cómo el WRP traicionó al trotskismo. En todos los sentidos de la palabra fue plenamente un coautor de ese documento.

Keerthi Balasuriya y David North - Septiembre de 1986

5. El camarada Wije había desempeñado un papel central en la dirección de la RCL desde su fundación. Ante la situación extraordinariamente difícil que enfrentó la RCL ante la repentina y totalmente inesperada pérdida de su brillante y aún muy joven líder, Wije asumió el cargo de secretario general. Aceptó esta responsabilidad en medio de la guerra civil, los ataques terroristas contra la RCL y el asesinato de sus miembros, por parte de los chovinistas cingaleses reaccionarios del JVP. El liderazgo firme y decisivo de Wije fortaleció a los miembros de la RCL.

6. Las características sobresalientes de Wije fueron su coraje personal ilimitado e inquebrantable y un compromiso inflexible con los principios políticos. Esto fue reconocido incluso por sus oponentes políticos, quienes, cuando estaban en su presencia, no pudieron evitar sentirse algo avergonzados de su propio oportunismo.

7. Wije no solo fue respetado. También fue querido. En una ocasión, que tuve la gran fortuna de observar, el camarada Wije, de origen cingalés, fue invitado a asistir, como invitado de honor, a un acto social en un barrio tamil de Colombo. La guerra civil todavía estaba en su apogeo. Pero la comunidad tamil estaba al tanto de la oposición intransigente del Partido Socialista por la Igualdad a la guerra racista. Cuando el camarada Wije entró en la sala, hubo una inmensa ovación. Era visto como el líder del único partido en Sri Lanka que está representado por la clase trabajadora de todas las comunidades étnicas y religiosas.

8. El camarada Wije Dias poseía una gran autoridad dentro del CICI. En todas las discusiones en las que participó, pudimos confiar en su vasta experiencia, objetividad y conocimiento, y también sentir un alivio gracias a su notable sentido del humor. Wije ha entrado en la historia del Comité Internacional y su ejemplo permanecerá para siempre como fuente de inspiración para los cuadros del Partido Mundial de la Revolución Socialista. En honor a su gran contribución a la lucha por el socialismo y la victoria de la clase obrera internacional, dedicamos esta escuela a la vida y memoria del camarada Wije Dias. Ahora guardaremos un minuto de silencio.

9. Quisiera también extender un saludo especial a nuestros compañeros de todo el mundo. Realizar una escuela de verano a escala internacional requiere que muchos camaradas asistan en medio de la noche, y participarán a pesar del cansancio físico que esto crea porque desean tomar parte en este importante estudio de la historia. de nuestro movimiento. Valoramos y agradecemos mucho su participación. Como explicaré, en el transcurso de esta conferencia, uno de los grandes logros de la escisión de 1985-86 fue el restablecimiento de un genuino internacionalismo revolucionario en nuestro movimiento.

10. Dos observaciones más. En primer lugar, en relación con el proceso de traducción. Cuando la camarada Andrea advirtió que no se utilicen oraciones demasiado largas, complicadas ni con muchas frases, tuve la sensación de que tal vez había revisado el borrador de mi discurso. Me disculpo de antemano.

11. En cuanto a la historia de las traducciones en reuniones como esta, recuerdo una historia que me contó hace muchos, muchos años, en 1975 para ser exactos, un revolucionario que había asistido al Segundo Congreso —disculpas, al Cuarto Congreso— de la Komintern en 1922. Era Arne Swabeck, fundador del Partido Comunista de los Estados Unidos en 1919 y más tarde fundador del movimiento trotskista, la Liga Comunista de Estados Unidos, como se la conocía entonces, en 1928. Tenía 85 años en ese momento, en perfecto estado de salud; todavía poseía una memoria asombrosa hasta de 1907. Me contó cómo asistió a una de sus primeras reuniones de masas en Alemania, cuando pasaba por Alemania viniendo de Dinamarca. Fue una reunión del Primero de Mayo en la que habló Rosa Luxemburgo. Comentó, con acento anglo-danés: “Ella era toda una oradora”.

12. Pero luego me contó su experiencia en 1922. Hubo dos anécdotas particulares que recuerdo muy bien. La primera fue su descripción de un discurso de Lenin. Todos sabían que Lenin había sufrido previamente un derrame cerebral y había una gran ansiedad por el estado de salud de Lenin. Pero subió a la plataforma y pronunció un discurso brillante. Todos los delegados extranjeros se sintieron muy animados, y el propio Swabeck se volvió hacia un delegado ruso sentado a su lado y le dijo: “Ese fue un discurso fabuloso”. Y el delegado ruso contestó: “Sí, pero deberías haber escuchado a Ilich antes de su derrame”.

León Trotsky

13. La segunda anécdota se relaciona directamente con las traducciones, y fue la intervención de Trotsky. Cuando iba a hablar, hubo una enorme excitación, una prolongada ovación. Pero cuando Trotsky comenzó a hablar, empezó con una disculpa, explicando que había preparado todas sus notas en alemán. El alemán era, por así decirlo, el idioma semioficial de la Internacional Comunista. Y dijo que por eso hablaría en alemán. En ese momento hubo una protesta de los delegados franceses, quienes dijeron: “Camarada Trotsky, esto no es justo. La traducción no es muy buena. Será difícil seguir su informe”. Trotsky dijo entonces en francés: “Camaradas, entiendo este problema. Cuando haya terminado mi presentación en alemán, iremos a otra sala y repetiré mi informe en francés”. En este punto, los delegados rusos comenzaron a gritar. “Tovarisch Trotsky, Lev Davidovich, esto no está bien. Si vas a hablar en alemán y luego en francés, debe dar su conferencia en ruso”. Él dijo: “Sí, camaradas, cuando termine mi conferencia a los delegados franceses, nos reuniremos por separado y daré mi informe en ruso”. Trotsky habló durante tres horas en alemán. Luego dio su informe en francés, y luego su informe en ruso, y Swabeck recordó que era ya bastante tarde, él estaba saliendo del edificio en el que se llevaban a cabo las sesiones de la Komintern, y vio a Trotsky saliendo de la reunión con los delegados rusos. Había hablado durante un total de nueve horas. Y recordaba ese evento como si hubiera sucedido el día anterior.

14. Trotsky fue verdaderamente una figura extraordinaria en la historia del movimiento, y es difícil, era difícil de comprender, que, en ese momento, solo pasarían meses antes de que estallara la lucha dentro del Partido Bolchevique que resultaría en su pérdida del poder. De todos modos, ahora estamos utilizando los medios de la inteligencia artificial y podemos aprovechar esta oportunidad para dar conferencias que ojalá sean seguidas con cierta facilidad por todos los compañeros del mundo entero que están participando en esta escuela.

15. La última escuela de verano presencial del Partido Socialista por la Igualdad se llevó a cabo del 21 al 28 de julio de 2019, solo unos meses antes del inicio de la pandemia de SARS-CoV-2. La escuela se dedicó a examinar el desarrollo de la perspectiva y el programa del Comité Internacional de la Cuarta Internacional después de la ruptura con el WRP en febrero de 1986. Esa ruptura fue el resultado de un conflicto prolongado dentro del CICI, que se desarrolló durante un período de tres años.

16. En octubre de 1982, la dirección de la Workers League había informado a Gerry Healy, Cliff Slaughter, Michael Banda y al Comité Político del WRP de diferencias sustanciales con la distorsión de los fundamentos filosóficos del marxismo por parte de la sección británica y su alejamiento del programa de la Revolución Permanente.

17. Los líderes británicos incumplieron su compromiso inicial de organizar una discusión exhaustiva de las diferencias planteadas por la Workers League, recurriendo en cambio en diciembre de 1982 a amenazas de una escisión inmediata a menos que la sección estadounidense retirara sus críticas. En condiciones en las que el Comité Internacional desconocía por completo la existencia de las diferencias que se habían planteado, se retiraron las críticas.

18. Sin embargo, el fracaso del WRP para corregir sus errores y su aceptación cada vez más abierta de la política pablista, ejemplificada por la crítica de Cliff Slaughter en noviembre de 1983 de nuestro “énfasis demasiado fuerte” en la independencia política de la clase trabajadora junto a la glorificación desenfrenada por parte del WRP de los Gobiernos reaccionarios burgueses en Oriente Próximo, obligó a la Workers League a renovar su demanda, en enero de 1984, de una discusión sobre la orientación política de la sección británica y la perspectiva mundial del Comité Internacional.

19. Una vez más, el WRP se propuso sabotear la organización de una discusión adecuada sobre cuestiones políticas. Recuerden, esta era una época en la que no había internet, ni correo electrónico, ni un envío fácil e instantáneo de documentos. De este modo, cuando los principales miembros de la Workers League llegaron a Londres en febrero de 1984, descubrieron que ni la sección de Sri Lanka ni la de Australia habían sido informadas de la reunión del CICI. No tenían delegados. El análisis exhaustivo preparado por la Workers League de la capitulación del WRP ante el pablismo se encontró una vez más con amenazas de una escisión inmediata. Decidida a evitar una ruptura organizativa prematura con el Comité Internacional en condiciones en las que el contenido e incluso la existencia de sus críticas permanecerían desconocidas para varias secciones del movimiento mundial, la Workers League volvió a retirar sus críticas al WRP.

20. Sin embargo, la crisis que estalló dentro del WRP en julio de 1985 no pudo ocultarse al Comité Internacional. Las críticas extensas y documentadas realizadas por la Workers League entre 1982 y 1984, que finalmente fueron circuladas a todo el WRP y el CICI, proporcionaron un análisis de las políticas oportunistas y del abandono del trotskismo que subyacían a la devastadora crisis organizativa en la sección británica.

21. Entre octubre y diciembre de 1985, los trotskistas ortodoxos restablecieron un control firme sobre el Comité Internacional. La sección británica fue suspendida del CICI, y su readmisión dependía de un renovado y explícito compromiso con los principios fundamentales del leninismo y el trotskismo, tal como se habían desarrollado y defendido desde los primeros cuatro congresos de la Internacional Comunista y la fundación de la Oposición de Izquierda en octubre de 1923.

22. El WRP no pudo cumplir con estas condiciones y se separó del Comité Internacional el 8 de febrero de 1986 en un congreso fraudulento donde la policía llamada por Slaughter prohibió que los miembros del WRP que apoyaban el Comité Internacional —y que en realidad constituían la mayoría de los miembros legítimos del partido— entraran a la sala de la reunión. Esta escisión fue llevada a cabo por Cliff Slaughter y Michael Banda sobre la base de un documento, escrito por Banda, titulado “27 Razones por las que el Comité Internacional debería ser enterrado de inmediato y la Cuarta Internacional construida”. El título del documento era a la vez irónico, ya que Banda no dio ni una sola razón para la construcción de la Cuarta Internacional.

23. Como predijo el CICI, prácticamente todos los que se adhirieron a este infame documento pronto repudiaron el trotskismo y toda asociación política con el programa de la revolución socialista. Muchos de ellos volvieron al estalinismo y otros se convirtieron en cómplices de las operaciones militares de la OTAN en Bosnia durante la guerra civil que siguió a la destrucción de Yugoslavia. Se convirtieron en anticomunistas absolutos y agentes del imperialismo.

24. Esta lucha, que se revisará con mayor detalle en tres conferencias a fines de esta semana, se encuentra entre los eventos más importantes en la historia de la Cuarta Internacional. Impidió la destrucción del movimiento trotskista y creó las condiciones para un renacimiento del marxismo y un inmenso desarrollo del trabajo teórico, político y organizativo del Comité Internacional.

25. Después de la escuela de 2019, la ruptura se situó en el contexto más amplio de la historia de la Cuarta Internacional. El informe de apertura identificó cinco fases o etapas distintas en la historia del movimiento trotskista.

26. La primera fase se extendió por un período de 15 años, desde la fundación de la Oposición de Izquierda en 1923 hasta la fundación de la Cuarta Internacional en 1938. Este período abarcó los acontecimientos históricos críticos y las experiencias estratégicas que determinaron todo el curso de la lucha del trotskismo contra el estalinismo y que constituyó la base del programa y la perspectiva de la Cuarta Internacional. Las lecciones esenciales de este trágico período, que presenció las mayores derrotas de la clase obrera internacional y la destrucción física de una gran parte de los cuadros del marxismo, se resumieron en la frase con la que Trotsky abrió el documento fundacional de la Cuarta Internacional: “La situación política mundial en su conjunto se caracteriza principalmente por una crisis histórica de la dirección del proletariado”.

27. La segunda fase se extendió por otro período de 15 años, desde la fundación de la Cuarta Internacional hasta la ruptura con la dirección pablista del Secretariado Internacional y la formación del Comité Internacional hace 70 años en noviembre de 1953. Esta fase, como explicamos en 2019, “abarca el asesinato de Trotsky, la totalidad de la Segunda Guerra Mundial, el establecimiento de regímenes estalinistas en Europa del Este, la reestabilización del capitalismo en Europa Occidental y Japón, el estallido de la Guerra Fría, la victoria de la Revolución china, el estallido de la guerra de Corea y, finalmente, la muerte de Stalin”.

James P. Cannon, en el medio, con Max Eastman, a la izquierda, y Haywood, en Moscú, 1922.

28. La tercera fase de la Cuarta Internacional abarcó 33 años de lucha dentro del Comité Internacional —no existe una Cuarta Internacional fuera del Comité Internacional— comenzando con la publicación de la Carta Abierta de James P. Cannon al Movimiento Trotskista Mundial y concluyó con la suspensión del WRP en diciembre de 1985 y la ruptura definitiva con los renegados nacional-oportunistas en febrero de 1986. Fue un período que hemos caracterizado como uno de guerra civil prolongada dentro del Comité Internacional, que estuvo marcado por una serie de intensos conflictos políticos con tendencias pablistas tanto fuera como dentro del CICI. El informe explicó:

A lo largo de este explosivo periodo, durante el cual poderosos movimientos de masas de la clase trabajadora plantearon objetivamente la posibilidad de una revolución socialista, el Comité Internacional tuvo que lidiar no solo con la presión implacable de los partidos estalinistas y socialdemócratas junto a sindicatos y organizaciones afines. Las organizaciones pablistas, aliadas a las mencionadas burocracias, así como una amplia capa de radicales pequeñoburgueses e intelectuales antitrotskistas, buscaron aislar al Comité Internacional, combinando implacables falsificaciones de la teoría marxista y de los principios de la Cuarta Internacional con una interminable serie de provocaciones políticas y organizativas.

29. Entre paréntesis, los informes que se darán esta semana se centrarán en esta tercera fase en la historia de la Cuarta Internacional, que incluirá experiencias cruciales de la Workers League —en particular, la ruptura con Wohlforth, el inicio de la investigación “Securidad y la Cuarta Internacional” y las intervenciones del partido en la lucha de clases— que llevaron a un desarrollo importante de los cuadros trotskistas en Estados Unidos y su oposición al rumbo oportunista del WRP. Como recalcamos en 2019:

La historia política de la WL y el trabajo teórico-político de la sección habían sensibilizado a la dirección de la WL —imbuida de la historia y los principios del movimiento trotskista— sobre los procesos económicos y eventos políticos objetivos. Esto generó insatisfacción política y disconformidad con el rumbo seguido por el WRP.

30. La cuarta fase de la historia de la Cuarta Internacional comenzó con la ruptura con el WRP en febrero de 1986, es decir, con la derrota decisiva de los oportunistas y el establecimiento de la autoridad política de los trotskistas dentro del Comité Internacional. Esto se verificó, como ya he subrayado, en el extraordinario desarrollo del CICI, finalmente liberado de la influencia destructiva y las maquinaciones del pablismo. El logro más crítico de este período fue el desarrollo de una perspectiva mundial que permitió al Comité Internacional alinear una práctica internacional políticamente unificada con la globalización objetiva de la vida económica y sus implicaciones para el desarrollo de la lucha de clases internacional.

31. Para explicar la intensa interacción de las secciones del CICI a partir de la división de 1985-86, hice referencia al informe que presenté en una reunión de miembros de Detroit el 25 de junio de 1989:

El alcance de esta colaboración internacional, su impacto directo en prácticamente todos los aspectos del trabajo práctico de cada sección ha alterado profunda y positivamente el carácter del CICI y sus secciones. Estas últimas están dejando de existir como entidades independientes en cualquier forma política y práctica significativa. Sobre la base de un programa político común, ha surgido una compleja red de relaciones dentro del CICI que une a todas las secciones. Es decir, las secciones del CICI constituyen componentes interconectados e interdependientes de un solo organismo político. Cualquier ruptura de esa relación tendría efectos devastadores dentro de la sección involucrada. Cada sección se ha vuelto ahora dependiente para su propia existencia de esta cooperación y colaboración internacional, tanto ideológica como práctica.

32. Los avances del Comité Internacional no fueron, ni pudieron ser, meramente el producto de la voluntad subjetiva y la sinceridad política de sus cuadros. Detrás de su desarrollo estuvieron involucrados cambios profundos en las condiciones socioeconómicas a escala mundial y su reflejo en las estructuras y relaciones políticas. A menudo hemos señalado que los principales acontecimientos dentro del movimiento trotskista —y especialmente en los intensos períodos de lucha interna del partido— han ocurrido como anticipación o como resultado de puntos de inflexión críticos en la política mundial.

33. La lucha de facciones de 1939-40 dentro del SWP se desarrolló como una respuesta casi inmediata al estallido de la Segunda Guerra Mundial. La escisión de noviembre de 1953 fue precipitada por la muerte de Stalin ocho meses antes, lo que puso en marcha una serie interminable de crisis dentro del Kremlin y el movimiento estalinista mundial. También reflejó el crecimiento de una forma de radicalismo de clase media que se desarrolló en oposición al movimiento de la clase obrera como una fuerza social políticamente independiente y revolucionaria.

34. Como pronto quedaría claro, la lucha dentro del Comité Internacional entre 1982 y 1986 anticipó la última etapa terminal en la degeneración de la burocracia estalinista, que culminó con la disolución de la Unión Soviética en diciembre de 1991. Podría haber parecido muy improbable para los observadores superficiales, especialmente aquellos dentro de la dirección del WRP, que la oposición aparentemente aislada de la Workers League se convertiría, en un período de solo tres años, en el eje de un nuevo realineamiento y de la mayoría trotskista dentro del Comité Internacional.

35. En el sentido más profundo, la fuerza de la oposición trotskista se derivó del hecho de que no solo analizó correctamente los procesos objetivos, sino que estos procesos –en contraste con la situación que existía en 1939-40, 1953, o incluso durante la lucha de la SLL contra la reunificación sin principios del SWP con los pablistas en 1961-63— fueron favorables para la corriente revolucionaria. Los procesos de globalización económica estaban destrozando los cimientos sociales de todas las formas de programas laboristas nacionales, socialdemócratas, estalinistas y sindicalistas. Todos los viejos partidos laboristas y sindicatos arraigados nacionalmente fueron incapaces de elaborar una respuesta viable a las nuevas realidades económicas. La disolución de la Unión Soviética y la desintegración de los partidos y organizaciones estalinistas de masas fueron la parte más importante de un proceso más amplio de ruptura del reformismo de base nacional.

36. Las principales iniciativas de las secciones del CICI, especialmente la transición de ligas a partidos y el lanzamiento del World Socialist Web Site, se basaron en una evaluación correcta de las fuerzas objetivas que proporcionaban un nuevo y poderoso impulso para la construcción del Comité Internacional como el Partido Mundial de la Revolución Socialista.

37. Resumiendo los 33 años entre 1986 y 2019, el informe decía:

El trabajo preparatorio crucial de expulsar a los pablistas, reconstruir el partido mundial sobre una base internacionalista, elaborar la estrategia internacional del Comité Internacional de la Cuarta Internacional, defender la herencia histórica de la Cuarta Internacional, convertir las ligas del Comité Internacional en partidos, y la creación del World Socialist Web Site fueron los principales logros de la cuarta etapa. Estos logros hicieron posible una gran expansión en la influencia política del Comité Internacional y un crecimiento significativo de sus miembros. Esta etapa ha concluido.

38. Después, el informe de 2019 afirmaba que había comenzado la quinta fase de la historia del movimiento trotskista:

Esta es la etapa que será testigo, dijimos, de un gran crecimiento del CICI como Partido Mundial de la Revolución Socialista. Los procesos objetivos de globalización económica, identificados por el Comité Internacional hace más de 30 años, han experimentado un inmenso desarrollo adicional. Combinados con la aparición de nuevas tecnologías que han revolucionado las comunicaciones, estos procesos han internacionalizado la lucha de clases a un grado que habría sido difícil de imaginar incluso hace 25 años. La lucha revolucionaria de la clase obrera se desarrollará como un movimiento mundial interconectado y unificado. El Comité Internacional de la Cuarta Internacional se construirá como la dirección política consciente de este proceso socioeconómico objetivo. Contrapondrá a la política capitalista de guerras imperialistas la estrategia de clase de la revolución socialista mundial. Esta es la tarea histórica esencial de la nueva etapa en la historia de la Cuarta Internacional.

39. Han pasado cuatro años desde que identificamos el inicio de la quinta fase en la historia de la Cuarta Internacional. Ahora debemos plantear la pregunta: ¿Los acontecimientos posteriores han corroborado esta evaluación, tanto en términos del desarrollo de la crisis económica y política objetiva del capitalismo, la intensificación de la lucha de clases y, finalmente, la actividad del partido?

40. Mirando hacia atrás en los últimos cuatro años, es un hecho indiscutible que la escuela de 2019 tuvo lugar en vísperas de una gran escalada de la crisis económica, política y social del capitalismo mundial. Además, a las pocas semanas de la conclusión de la escuela, lo que pudo haber parecido un acontecimiento fortuito brindó una indicación significativa de un desarrollo cualitativo en la influencia política e intelectual del partido.

41. El 19 de agosto de 2019, el New York Times publicó en su revista dominical una serie de ensayos, de los cuales el más destacado fue el artículo de Nikole Hannah-Jones, que anunciaba el lanzamiento del Proyecto 1619. Dedicando enormes recursos para este proyecto, el periódico corporativo burgués más influyente en los Estados Unidos, el medio de comunicación insignia del Estado estadounidense, las agencias de inteligencia y el establishment académico, anunció que estaba iniciando una revisión fundamental de la narrativa de la historia estadounidense. Ni la Revolución ni la guerra civil estadounidenses debían verse más como eventos históricos progresistas. El Proyecto 1619 pretendió que desenmascararía decisivamente a la Revolución como una rebelión desesperada y cínica de propietarios de esclavos, decididos a frustrar los esfuerzos del Imperio Británico y del heroico lord Dunmore para promover la causa de la emancipación.

42. En cuanto a la guerra civil, afirmaron, tuvo poco que ver con la destrucción de la esclavitud. El ejército de la Unión fue, a lo sumo, un actor menor en el drama mucho mayor de la autoemancipación de los esclavos. En cuanto a Lincoln, era un racista mezquino y vil, que nada deseaba tanto como la expulsión de los negros del continente norteamericano y su regreso a África.

43. Esta revisión de la historia mentirosa, intelectualmente ruinosa y basada en gran medida en el reciclaje de la mitología racista reaccionaria de los propagandistas nacionalistas negros como Lerone Bennett Jr. fue aclamada de inmediato por los medios y un coro de académicos como una revelación pendiente por mucho tiempo. En gran medida, no habría sido cuestionada si no hubiera sido por la intervención del World Socialist Web Site. El 3 de septiembre de 2019, solo dos semanas después del inicio del Proyecto 1619, el WSWS publicó su primera respuesta importante, titulada: “El Proyecto 1619 del New York Times: una falsificación racialista de la historia estadounidense y mundial”.

44. Esta exposición exhaustiva de los burdos y evidentes errores en el ensayo de Hannah-Jones fue seguida no solo por ensayos que desarrollaron la crítica del Proyecto 1619. El camarada Tom Mackaman entrevistó a los principales historiadores, incluyendo a Gordon Wood, James McPherson, James Oakes, Richard Carwardine, Victoria Bynum y Clayborne Carson, quienes refutaron detalladamente las afirmaciones clave del Proyecto 1619.

45. Los ensayos y entrevistas publicados en el World Socialist Web Site atrajeron la atención nacional e internacional y pusieron al New York Times a la defensiva. El torpe intento de sus editores de salvar la credibilidad del Proyecto con correcciones no anunciadas y/o sin explicación en el texto original del ensayo de Hannah-Jones solo sirvió para desacreditar aún más su patética campaña de propaganda.

46. El papel desempeñado por el WSWS en la denuncia del Proyecto 1619 fue de inmensa importancia intelectual y política. El movimiento trotskista, desde sus inicios, se ha visto obligado a desenmascarar las grotescas mentiras sobre la Revolución de Octubre y la historia soviética de los historiadores estalinistas y burgueses. Después de la disolución de la URSS, el Comité Internacional publicó una inmensa cantidad de literatura que exponía las mentiras de la escuela postsoviética de falsificación histórica, como las obras de Vadim Rogovin, que fueron escritas en estrecha colaboración con el Comité Internacional. —así como la divulgación de los ensayos escritos en respuesta a las calumnias contra Trotsky de los profesores Ian Thatcher, Geoffrey Swain y Robert Service, que se publicaron en el volumen In Defense of Leon Trotsky.

47. Es de esperar que el movimiento trotskista tome la iniciativa en denunciar la falsificación de la historia del movimiento socialista. Pero el hecho de que la defensa de la Revolución y la guerra civil estadounidenses requiriera y dependiera totalmente de la intervención del movimiento trotskista tiene un significado político de gran alcance. Corrobora, en el ámbito de la vida intelectual de los Estados Unidos, una premisa fundamental de la teoría de la revolución permanente. En la época de la decadencia imperialista, la defensa sistemática e inquebrantable de las conquistas cruciales y duraderas de las revoluciones democráticas —lo que incluye la defensa intelectual de su legitimidad histórica— solo puede sostenerse mediante la lucha del movimiento socialista y la movilización de la clase trabajadora.

48. La primera edición del World Socialist Web Site en 2020 publicó un artículo de perspectiva titulado: “La década de la revolución socialista inicia”. En ella se afirmaba:

La llegada del Año Nuevo da inicio a una década de intensificación de la lucha de clases y la revolución socialista mundial.

En el futuro, cuando los historiadores cultos escriban sobre los levantamientos del siglo veintiuno, enumerarán todas las señales “obvias” a inicios de la década de 2020 de la tormenta revolucionaria que pronto recorrería el globo. Los investigadores, con amplios hechos, documentos, gráficos, publicaciones en línea y redes sociales y otras formas valiosas de información digitalizada a su disposición, describirán la década de 2010 como un periodo caracterizado por una crisis económica, social y política irresoluble del sistema capitalista mundial.

Señalarán que, para el comienzo de la tercera década del siglo, la historia había alcanzado la situación prevista teóricamente por Karl Marx: “Al llegar a cierta etapa de su desarrollo, las fuerzas productivas materiales de la sociedad entran en conflicto con las relaciones de producción existentes o —lo que significa lo mismo en términos legales— con las relaciones de propiedad en las que han operado hasta ese momento. Estas relaciones pasan de ser formas de desarrollo de las fuerzas productivas a ser sus grilletes. Luego comienza una época de revolución social. Con el cambio de las fundaciones económicas, toda la inmensa superestructura se transforma más o menos deprisa”.

49. Es probable que muchos lectores de la web, incluidos aquellos que generalmente están de acuerdo con las perspectivas del Comité Internacional, y quizás miembros de nuestro partido, se inclinaran a ver esta perspectiva como un ejercicio de exageración retórica, ocasionado por la celebración de una nueva década, más que una evaluación seria de la situación histórica.

50. Pero la clarividencia de esta declaración debía ser verificada por los acontecimientos. Antes de que concluyera el primer mes de 2020, los primeros informes de una posible pandemia se publicaban en los medios de comunicación. El WSWS publicó su primer artículo sobre el brote del nuevo coronavirus el 24 de enero de 2020. Rápidamente reconoció el inmenso peligro global que representaba la pandemia en rápido desarrollo. El 28 de febrero de 2020, el CICI emitió una declaración titulada: “Por una respuesta de emergencia coordinada a nivel mundial a la pandemia de coronavirus”. Con un nivel de claridad inigualable por cualquier otra publicación, el CICI captó las vastas implicaciones económicas, sociales y políticas de la pandemia, que definió como un “evento desencadenante” que intensificaría todas las contradicciones inherentes a la sociedad capitalista a escala global.

51. En una muestra más del papel esencial de la intervención del partido en los principales acontecimientos políticos y sociales, el Comité Internacional asumió el liderazgo de la lucha mundial contra la pandemia, brindando una perspectiva y una dirección política para los profesionales sanitarios, los científicos y para amplios sectores de la clase trabajadora. En una época anterior, las crisis de salud pública de gran calado dieron lugar a amplias iniciativas públicas para educar a la sociedad y erradicar las enfermedades infecciosas. Nada de eso ocurrió en respuesta al brote de la pandemia de SARS-CoV-2. La oposición organizada y efectiva a la política de “negligencia maligna”, como describió el WSWS en respuesta a los Gobiernos burgueses ya en marzo de 2020, provino solo del Comité Internacional.

52. El 6 de marzo del 2020, el SEP publicó una declaración titulada “Qué se debe hacer para combatir la pandemia del coronavirus”. El 14 de marzo del 2020, el SEP publicó otra declaración pidiendo “un cierre inmediato de toda la producción automotriz y no esencial en todo el país en respuesta a la pandemia de coronavirus, con pago completo para todos los trabajadores afectados”. A esto le siguió el 17 de marzo una declaración del Comité Nacional del SEP, “Cómo combatir la pandemia del Covid-19: un programa de acción para la clase trabajadora”. Estas declaraciones desempeñaron un papel importante en el desencadenamiento de fuertes huelgas en Míchigan, que obligaron a las corporaciones a cerrar temporalmente las plantas en toda América del Norte. Creo que se debe enfatizar que, en este momento, el número total de muertes en los Estados Unidos todavía era de solo unas pocas docenas. Y en todo el mundo, alcanzaban unos pocos miles. Tenemos derecho a preguntar cuántas vidas se habrían salvado si se hubiera adoptado la política propuesta por nuestro partido. Bueno, sabemos la respuesta: se habría salvado la vida de millones.

53. El WSWS definió las tres principales respuestas políticas a la pandemia: 1) la respuesta del Estado capitalista de la “inmunidad colectiva”; 2) la respuesta reformista liberal de “mitigación”; y 3) el programa científicamente fundamentado y necesariamente socialista de eliminación y erradicación del virus. El WSWS realizó dos seminarios web internacionales, reuniendo a destacados científicos y expertos en salud pública, para educar a la clase trabajadora y generar un apoyo masivo para la implementación de la política de eliminación/erradicación.

54. El 24 de abril del 2021, el Comité Internacional emitió su llamamiento a la formación de la Alianza Internacional Obrera de Comités de Base como respuesta necesaria a la pandemia y a la necesidad de coordinar las luchas de la clase trabajadora a escala global.

55. En noviembre de 2021, justo antes del brote de la devastadora variante ómicron, el WSWS inició una investigación internacional sobre la pandemia. Esta iniciativa, que sigue en curso, ha sido la investigación más avanzada y completa sobre el impacto social y global de la pandemia y la respuesta criminal de los Gobiernos capitalistas.

56. La respuesta del CICI a la pandemia no se ha limitado a comentarios. O, para decirlo con mayor precisión, su análisis de la pandemia ha estado inseparablemente ligado a la organización de la oposición masiva de la clase trabajadora a las políticas asesinas de todos los Gobiernos.

57. El 6 de enero de 2021, Donald Trump organizó el ataque del Capitolio por parte de una muchedumbre para impedir la ratificación de la victoria de Biden en las elecciones de noviembre de 2020, perpetuar su control de la Casa Blanca y establecer, de hecho, una dictadura presidencial. El intento de golpe, que había sido previsto por el World Socialist Web Site, fue un evento sin precedentes en la historia de los EE. UU. y corroboró el análisis del SEP sobre la crisis terminal de la democracia estadounidense. El fracaso del golpe —atribuible mucho más a la inexperiencia táctica de la turba que a la resistencia organizada de las fuerzas del Estado— no ha estabilizado la situación política. Las próximas elecciones presidenciales se desarrollan bajo la sombra persistente del golpe de Estado de 2021.

58. Para finalizar, dado que hacemos un estudio de las experiencias desde la escuela de 2019 y su identificación del inicio de la quinta fase: el 24 de febrero de 2022, Rusia invadió Ucrania. Lejos de ser el comienzo repentino e inesperado de lo que la Administración de Biden y sus contrapartes en Europa, junto con los medios, denunciaron como una “guerra no provocada”, fue el resultado de provocaciones bien preparadas de la OTAN, que se remontan al golpe de Estado del Maidán en 2014 e incluso antes, con el objetivo de llevar a Rusia a una guerra desastrosa que desestabilizaría el régimen y conduciría a la desintegración de la Federación Rusa.

59. Como hemos señalado en ocasiones anteriores, las declaraciones publicadas en el WSWS durante los últimos diez años son las refutaciones más aplastantes de la narrativa de la “guerra no provocada”. Hay cientos de artículos y declaraciones en las que el WSWS advierte explícitamente sobre los implacables preparativos de Estados Unidos para la guerra contra Rusia y China. Desde el 24 de febrero de 2022, el número total de artículos relacionados con la guerra en Ucrania se acerca a los 1.000. Incluso si hubiéramos decidido dedicar una semana entera a una revisión de la cobertura de la guerra por parte del WSWS, esta cantidad limitada de tiempo habría requerido una cuidadosa selección de documentos.

60. La guerra es la verificación más crucial del reconocimiento por parte del Comité Internacional tanto del inicio de la quinta fase de su historia como de la década de 2020 como una década de luchas revolucionarias. Al ser la manifestación más extrema de las contradicciones del capitalismo estadounidense y el sistema capitalista mundial en su conjunto, la implacable escalada de la guerra plantea ante la clase obrera las alternativas del socialismo o la barbarie.

61. La comprensión del carácter fundamentalmente existencial de la crisis requiere el reconocimiento de que la provocación deliberada de esta guerra y la temeraria determinación de escalar el enfrentamiento tanto con Rusia como con China, dos potencias con armas nucleares, no son producto meramente de una agresión irracional. Como en la década de 1930, las clases dominantes no ven otra salida a su crisis que la guerra. En 1938, Trotsky escribió en el inicio del Programa de Transición que las potencias imperialistas eran incluso menos capaces de evitar la Segunda Guerra Mundial que en vísperas de la Primera Guerra Mundial. Es posible afirmar, con la misma urgencia, que las élites capitalistas de América del Norte y Europa son menos capaces de prevenir la Tercera Guerra Mundial que el estallido de la Segunda Guerra Mundial.

62. Se debe suponer que la Administración de Biden no ignora por completo la alta probabilidad de que una guerra nuclear resulte en la muerte de decenas de millones de personas y la destrucción de los Estados Unidos; deberíamos decir cientos de millones de personas solo en los Estados Unidos. Pero esto únicamente puede significar que una guerra nuclear es vista por las élites gobernantes como un riesgo necesario para lograr objetivos aún más críticos para la supervivencia del capitalismo estadounidense. Además, desde el punto de vista de la clase dominante, un Estados Unidos sin capitalismo es un país al que no vale la pena salvar.

63. En el análisis del imperialismo estadounidense desarrollado durante muchas décadas por el Comité Internacional, hemos subrayado que Estados Unidos ha buscado sistemáticamente compensar su prolongado declive económico frente a sus principales rivales capitalistas mediante la utilización de la fuerza militar.

64. Esta relación entre el declive económico y el recurso a soluciones militares ha adquirido el carácter de una ley de la geopolítica contemporánea. La preservación del papel central de los Estados Unidos en la geopolítica mundial, por no hablar de su lucha por lograr la hegemonía, está totalmente ligada al mantenimiento del dólar estadounidense como la indiscutible moneda de reserva mundial. Esta constituye la base principal para el dominio de Estados Unidos en los asuntos mundiales y, algo no menos importante, para evitar la bancarrota financiera del país.

65. Es importante recordar que la base del sistema de Bretton Woods, que existió desde 1944 hasta 1971, fue la convertibilidad del dólar en oro a razón de 35 dólares la onza. La viabilidad de este sistema dependía del dominio industrial y financiero de los Estados Unidos, lo que garantizaría superávits comerciales y de balanza de pagos. La caída de esos índices esenciales durante la década de 1960 finalmente obligó a Estados Unidos a rechazar el vínculo entre el dólar y el oro en agosto de 1971.

Deuda federal de Estados Unidos.

66. En pocas palabras, como la deuda se acumulaba en el extranjero, y recuerdo que hubo lo que llamaron un exceso de 80 mil millones de euro-dólares en 1971, esto hizo imposible seguir garantizando que la repatriación de estos dólares de Europa a los Estados Unidos podría ser reembolsada en oro: fue esto lo que obligó a Estados Unidos a abandonar el vínculo oficial del dólar con el oro y pasar a un sistema de tipos de cambio flotantes. ¡Hace cincuenta años! Es decir, el tipo de cambio diario de las monedas se determinaría en el mercado, influenciado por factores tales como la balanza comercial de un país, los saldos de las cuentas corrientes y el estado del presupuesto nacional.

67. En las décadas que siguieron al colapso de Bretton Woods, los Estados Unidos acumularon niveles cada vez mayores de deuda y déficit. Sin embargo, el papel del dólar como moneda de reserva mundial se ha mantenido, aunque solo sea por la ausencia de cualquier otra moneda nacional que suplante al dólar. Esto le ha dado a los Estados Unidos inmensos privilegios. Como proveedor de la moneda principal del mundo, se le ha permitido acumular enormes déficits presupuestarios, comerciales y de pagos.

68. Sin embargo, los acontecimientos de los últimos 15 años han puesto seriamente en cuestión la continuidad del papel global único del dólar. Primero, la escala de la deuda nacional de los Estados Unidos ha crecido exponencialmente. No fue sino hasta 1982 que la deuda nacional superó la marca del billón de dólares. Ahora supera los 32 billones de dólares. La deuda nacional es más del 100 por cien del producto interior bruto de los Estados Unidos.

69. La explosión en la escala de la deuda pública durante los últimos 15 años está directamente relacionada con dos grandes rescates de Wall Street: el primero en 2008 y el segundo, incluso mayor, en respuesta al desplome de Wall Street en el 2020 provocado por la pandemia.

70. Otro factor que ha influido en la situación del dólar ha sido que los Estados Unidos ha utilizado su divisa cada vez más como arma, mediante sanciones financieras, contra rivales extranjeros que llevan la contraria a sus intereses. Como escribió el influyente experto en política exterior estadounidense Fareed Zakaria en el Washington Post el 24 de marzo de 2023:

El dólar es el superpoder de Estados Unidos. Le da a Washington un músculo económico y político inigualable. Estados Unidos puede imponer sanciones a los países de manera unilateral, aislándolos de gran parte de la economía mundial. Y mientras Washington gasta a manos llenas, puede estar seguro de que su deuda, normalmente en forma de bonos del Tesoro, será comprada por el resto del mundo.

71. Pero Zakaria expresó su preocupación de que las agresivas acciones de Estados Unidos estén generando una reacción peligrosa. Él dijo:

El uso del dólar como arma por parte de Washington durante la última década ha llevado a muchos países importantes a buscar formas de asegurarse de que no se conviertan en la próxima Rusia. La proporción de dólares en las reservas de los bancos centrales mundiales se ha reducido de aproximadamente el 70 por ciento hace 20 años a menos del 60 por ciento en la actualidad, y sigue cayendo. Los europeos y los chinos están tratando de construir sistemas de pagos internacionales fuera del sistema SWIFT, que utiliza dólares. Arabia Saudita ha coqueteado con la idea de fijar el precio de su petróleo en yuanes. India está liquidando la mayoría de sus compras de petróleo a Rusia en monedas distintas del dólar. Las monedas digitales, que están siendo exploradas por la mayoría de las naciones, podrían ser otra alternativa; de hecho, el Banco Central de China ha creado una. Todas estas alternativas añaden costos, pero los últimos años debieron habernos enseñado que las naciones están cada vez más dispuestas a pagar un precio por lograr objetivos políticos.

72. La clase dominante estadounidense está cada vez más preocupada de que el surgimiento de China como un importante rival económico pueda acelerar un alejamiento del dólar, que otro sistema de financiación de las transacciones comerciales mundiales —posiblemente basado en una cesta de monedas o, lo que es aún más amenazador, en el aumento del uso del oro— prive al dólar de su estatus único.

73. Una audiencia reciente, celebrada en junio, del Subcomité de Instituciones Financieras y Política Monetaria del Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, se tituló: “Dominio del dólar: preservar la economía de EE. UU. El estatus del dólar como moneda de reserva global”. En su declaración de apertura, la congresista Joyce Beatty, una demócrata negra de Ohio, declaró:

El dólar estadounidense se considera la moneda de reserva mundial porque aproximadamente el 60 por ciento de las reservas de los bancos centrales de todo el mundo se mantienen en dólares estadounidenses. El dólar es la moneda preferida para el comercio internacional. El petróleo tiene un precio y se liquida en dólares estadounidenses, y casi el 90 por ciento de las transacciones en los mercados de divisas involucran, sí, el dólar. El mercado de bonos del Tesoro de EE. UU. es también el mercado más profundo y líquido del mundo, y la confiabilidad y estabilidad de los mercados de capital de EE. UU. hacen que el dólar sea la moneda preferida por los inversionistas.

El dominio y la supremacía de la moneda brinda a los Estados Unidos numerosos beneficios, desde la reducción de los costes de endeudamiento hasta una mayor estabilidad financiera para influir en los mercados financieros mundiales. También nos permite impulsar medidas económicas contra aquellos que buscan amenazar nuestra seguridad nacional y nuestra política exterior. Dado el valor innegable del dólar estadounidense como posición dominante, es fundamental que examinemos la moneda y expongamos las amenazas sobre ella.

Mientras hablamos, adversarios extranjeros como Rusia y China están trabajando activamente para socavar el dólar estadounidense y paralizar nuestro poder e influencia global. Vemos esto en la rápida acumulación de reservas de oro en Rusia durante la última década, así como en el desarrollo de sistemas que no son SWIFT en China para liquidar y compensar transacciones.

74. En la misma audiencia, Marshall Billingslea, quien ayudó a diseñar “técnicas de interrogatorio mejoradas” [tortura] durante la “guerra contra el terrorismo” y que ocupó muchos cargos de alto nivel, expresó su preocupación de que el dólar pudiera sufrir el destino del real de a ocho español del siglo dieciséis, el florín neerlandés del siglo diecisiete y, por último, la libra esterlina británica. Afirmó que el “vínculo entre la moneda de una nación como unidad preferida para el comercio y el dominio relativo de esa nación en el escenario global es claro”. Continuó:

Y es por eso que líderes como Lula, Putin y Xi aspiran a socavar el papel del dólar como moneda de reserva global, tanto como aspiran a erosionar el marco de seguridad internacional que tan laboriosamente construimos después de la Segunda Guerra Mundial. En última instancia, lo ven como una forma de desplazar a Estados Unidos como líder del mundo libre. En un plazo más cercano, lo ven como una forma de erosionar nuestra capacidad de utilizar las finanzas como una herramienta para salvaguardar nuestra seguridad nacional.

75. Significativamente, Billingslea expresó gran preocupación por la acumulación de oro por parte de Rusia y China. Dijo:

En marzo de 2018, Rusia comenzó a deshacerse de la propiedad de los bonos del Tesoro de EE. UU., de 96 mil millones de dólares a 15 mil millones. Rusia también comenzó a comprar grandes cantidades de oro, convirtiéndose en el quinto mayor poseedor mundial (con 2.300 toneladas). …

China ahora se está embarcando en su propia fiebre de compras de oro. Todavía no he visto los datos de mayo, pero abril marcó el sexto mes consecutivo de expansión china en sus reservas de oro, con un almacenamiento que superó las 2.000 toneladas. Al menos esas son las cifras oficiales. Sospecho que, de hecho, el número es mucho mayor y que están ocultando cantidades generadas por la minería de oro china en todo el mundo; China es el mayor productor de oro del mundo y la mitad es de propiedad estatal. China es también el mayor importador de oro del mundo, gran parte del cual no se declara. Como mínimo, la República Popular China está acumulando una reserva de guerra con activos que serán más difíciles de tocar a través de sanciones financieras. Pero si China comienza a respaldar los contratos del yuan con oro, también puede eliminar un impedimento importante para que el yuan pueda desafiar al dólar al resolver las preocupaciones sobre su convertibilidad.

76. Jeffrey A. Frankel de la Escuela Kennedy de Harvard presentó un artículo el 24 de marzo de 2023 en una conferencia organizada por el Instituto Peterson de Economía Internacional en Washington D.C. La sesión en la que habló se tituló: “¿Se puede mejorar o reemplazar el sistema basado en el dólar?”.

Llamó la atención sobre el significado renovado del oro. Las divisas nacionales no son necesariamente el único tipo de reservas internacionales ni, en realidad, el único tipo de unidad de cuenta internacional o medio de pago. Un activo alternativo, aunque hasta hace poco era considerado por la mayoría de los economistas como “una reliquia del pasado bárbaro”, ahora está recuperando un papel activo como componente de las reservas internacionales. Se trata del oro. La otra alternativa es nueva: la criptomoneda (¿una señal de un futuro bárbaro?).

Pensamos hace mucho que la tenencia de oro de los bancos centrales era un anacronismo. Las autoridades monetarias en muchos países aún conservan algo de oro, pero no lo tratan como una parte activa de sus reservas internacionales. Es decir, no lo compran ni venden. Sin embargo, en años recientes, los bancos centrales, especialmente en Asia, han estado comprando (y vendiendo) oro.

77. La guerra en Ucrania está bastante avanzada en su segundo año. La escala de muerte y destrucción supera todo lo que se ha presenciado en Europa desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Se desconoce el número de soldados ucranianos y rusos que han muerto o han resultado heridos. Ni los regímenes ucraniano ni ruso están proporcionando cifras precisas. Pero hay suficiente información para estimar plausiblemente que el número de muertes ucranianas es de al menos 200.000 y posiblemente mucho mayor. El número de muertes rusas bien puede estar acercándose a 100.000. Prácticamente ninguno de los que han muerto son responsables de esta guerra. Los muertos ucranianos y rusos son las víctimas inocentes de las decisiones tomadas por las potencias imperialistas de la OTAN, sus títeres en Kiev y el régimen políticamente en bancarrota de Moscú.

Trabajadores funerarios bajan el ataúd del soldado ucraniano Andrii Husak, conocido como Lytsar, de la 47º brigada, durante un entierro en Dnipró, Ucrania, 11 de julio de 2023 [AP Photo]

78. Es cierto que Estados Unidos y la OTAN instigaron la guerra. Pero la decisión reaccionaria del régimen de Putin de invadir es el producto final de la disolución de la Unión Soviética, la restauración del capitalismo y la transferencia del poder político a una banda de oligarcas corruptos. Todos los desastrosos errores de cálculo del Gobierno de Putin tienen su origen en la idea delirante de que la restauración del capitalismo daría como resultado la prosperidad y la integración benigna de Rusia en la hermandad de las naciones capitalistas. Putin creía que le bastaría con denunciar el marxismo y la Revolución de Octubre para ganarse la confianza y la amistad de sus llamados “socios occidentales”. Pero el imperialismo estadounidense y europeo no quiere la amistad de Putin. Quiere un acceso sin restricciones al oro, platino, litio, molibdeno, titanio y cobalto de Rusia y a otros metales y minerales estratégicos esenciales que se encuentran en el suelo de ese vasto país.

79. Esta guerra no es un episodio pasajero. Cualquiera que sea el resultado a corto plazo de la lucha, el conflicto es un hito en la normalización de la guerra y la aceptación de los asesinatos en masa en la búsqueda de objetivos geopolíticos. La clase dominante estadounidense apenas intenta ocultar sus planes de guerra global. La guerra con Rusia y China no es una cuestión de “si sucederá”, sino de cómo y cuándo se librará. En una declaración contundente de objetivos geopolíticos, The National Interest, una influyente revista, argumentó que el objetivo principal de la diplomacia estadounidense no debería centrarse en evitar la guerra con Rusia y China, sino en encontrar “una forma de escalonar sus contiendas con estas dos potencias para asegurarse de que no se enfrente a ambos al mismo tiempo en una guerra”.

80. La guerra en Ucrania es la confirmación más poderosa de la identificación del Comité Internacional del carácter revolucionario de la presente década. Pero ¿cómo se relaciona esto con su evaluación de la quinta fase de la historia de la Cuarta Internacional? La respuesta a esta pregunta requiere una comprensión marxista de la relación, en el contexto de una época revolucionaria, entre el desarrollo objetivo de la crisis capitalista y la inevitable intensificación del conflicto de clases y la práctica subjetiva del partido revolucionario.

81. En todas sus principales declaraciones sobre la cuestión de la guerra, Trotsky enfatizó repetidamente dos puntos fundamentales. El primer punto es que el impulso hacia la guerra imperialista solo puede detenerse mediante el derrocamiento revolucionario del capitalismo por parte de la clase obrera. El segundo punto es que el logro de este derrocamiento requiere la construcción de la Cuarta Internacional como dirección revolucionaria de la clase trabajadora. El desarrollo del movimiento espontáneo de la clase obrera, sin dirección revolucionaria, no detendrá ni la guerra ni la imposición por parte de la clase dominante del régimen dictatorial-fascista que se requiere para librar una guerra total.

82. En su discurso final de cuatro horas ante la Comisión Dewey en abril de 1937, Trotsky respondió a la mentira estalinista de que daba la bienvenida a la guerra como un medio para acelerar el estallido de la revolución. Esta declaración fue una exposición concisa de la relación entre guerra y revolución.

De hecho, la guerra a menudo ha acelerado la revolución. Pero precisamente por esta razón a menudo ha producido fracasos. La guerra agudiza las contradicciones sociales y el descontento de las masas. Pero eso es insuficiente para el triunfo de la revolución proletaria. Sin un partido revolucionario arraigado en las masas, la situación revolucionaria lleva a las más crueles derrotas. La tarea no es “acelerar” la guerra. Lamentablemente, a esto se están dedicando los imperialistas de todos los países, con éxito. La tarea es utilizar el tiempo que los imperialistas todavía dejan a las masas para construir un partido revolucionario y sindicatos revolucionarios.

Es de vital interés para la revolución proletaria que el estallido de la guerra sea demorado tanto como sea posible, que se gane el mayor tiempo posible para la preparación. Cuanto más firme, más valiente y más revolucionaria sea la dirección de los obreros, más dudarán los imperialistas, cuanto mayor sea la posibilidad de posponer la guerra, mayores serán las posibilidades de que la revolución ocurra antes que la guerra y quizás imposibilite la guerra misma…

La guerra y la revolución son los fenómenos más graves y trágicos de la historia humana. No se los puede tomar a la ligera. No toleran diletantismo. Debemos comprender claramente la interrelación de la guerra y la revolución. Debemos entender, con la misma claridad, la interrelación de los factores revolucionarios objetivos, que no pueden ser inducidos a voluntad, y el factor subjetivo de la revolución, la vanguardia consciente del proletariado, su partido. Es necesario preparar este partido con la mayor energía.

83. Esta es la perspectiva sobre la cual el partido debe basar su trabajo. Es la única perspectiva realista. Nuestro trabajo parte de la premisa fundamental e históricamente verificada de que la clase obrera es la fuerza revolucionaria fundamental de la sociedad, capaz —en virtud de su papel objetivo en el proceso de producción— de derrocar al sistema capitalista y crear una alternativa, el socialismo. Si la clase obrera puede o no alcanzar el nivel necesario de autoconciencia política y comprensión de sus tareas históricas no es un tema para especulaciones ociosas. Lo que se puede o no lograr se determinará en la práctica. Como hubiera dicho Trotsky, la lucha decidirá. Sin duda es cierto que las revoluciones han sufrido derrotas. Pero se ha demostrado, sobre todo en la experiencia de 1917, que la clase obrera, con la dirección necesaria, puede derrocar a la clase dominante.

84. No perderemos el tiempo especulando sobre si la clase obrera luchará o no, o si la clase obrera estadounidense aceptará la solución socialista a la crisis. Nuestros esfuerzos deben concentrarse en elevar el trabajo del partido al más alto nivel posible. Pero si los escépticos aún exigen una respuesta más definitiva, responderé que tenemos suficientes ejemplos de luchas sociales de masas dentro de los Estados Unidos e internacionalmente para justificar la confianza en el potencial de la clase trabajadora. El mundo está hirviendo con ira revolucionaria. Un estado de ánimo de rebelión está barriendo el mundo. Las calles de París se han llenado repetidamente con cientos de miles de manifestantes. El principal obstáculo para el desarrollo de la revolución no es la falta de voluntad de lucha de los trabajadores, sino el sabotaje llevado a cabo por los sindicatos y las organizaciones políticas reaccionarias, en muchos casos dominadas por la pseudoizquierda de la clase media acomodada.

85. Además, la intervención del partido en las elecciones del sindicato UAW el año pasado proporcionó una idea de la conciencia de la clase trabajadora. La candidatura del camarada Will Lehman, quien manifestó abiertamente sus convicciones socialistas y llamó a la abolición del aparato, obtuvo el apoyo de 5.000 trabajadores automotores. Y miles más habrían votado por él si hubieran sido informados de esta elección. Pero la burocracia, que reconoce y teme el crecimiento del radicalismo político y el movimiento hacia el socialismo, hizo todo lo posible para bloquear la participación de los trabajadores en la votación.

86. La campaña de Lehman es una demostración significativa de cómo el SEP lidera una oposición militante dentro de la clase trabajadora a los aparatos burocráticos de los sindicatos reaccionarios. La Alianza Internacional Obrera de Comités de Base, iniciada por el partido, se está desarrollando dentro de los Estados Unidos e internacionalmente como un movimiento genuino de trabajadores militantes en fábricas y lugares de trabajo en todo el país.

87. Pero el crecimiento del movimiento de masas de la clase obrera impone exigencias cada vez mayores a los miembros del partido. Enfrentar estos desafíos requiere una mayor atención a la educación de los miembros del partido. El elemento más importante de esta educación es aumentar el conocimiento y la comprensión de los cuadros sobre la historia del movimiento trotskista.

88. Para el movimiento marxista, el conocimiento histórico siempre ha sido el fundamento de la práctica revolucionaria. La asimilación de la experiencia histórica es la base para una práctica guiada teóricamente, que debe trascender un enfoque pragmático de la política que generalmente toma la experiencia individual y las impresiones personales como punto de partida de la actividad política. En un importante ensayo sobre las tendencias filosóficas del burocratismo, Trotsky escribió:

… ¿los empiristas no tienen razón dado que se orientan por medio de la práctica “directa” como tribunal supremo de la autoridad? ¿No son ellos, en este caso, los materialistas más consistentes? No, ellos no representan más que una caricatura del materialismo. Ser guiado por la teoría es ser guiado por generalizaciones basadas en toda la experiencia práctica anterior de la humanidad, con el fin de poder pautar, con el mayor éxito posible, uno u otro problema práctico de hoy. De ese modo, a través de la teoría, descubrimos precisamente la primacía de la práctica en su conjunto sobre los aspectos particulares de la práctica.

89. Las generalizaciones que utiliza el partido revolucionario para orientar su respuesta a los problemas que plantea la crisis actual y el desarrollo de la lucha de clases se derivan de la asimilación de un vasto cuerpo de experiencia histórica. Cuando explicaba la degeneración del Partido Bolchevique, Trotsky, quien una vez fue descrito como un hombre de historia, incluso se basó en los acontecimientos de la Revolución francesa, empleando el término Termidor, el período de reacción política que comenzó en julio de 1794 con la ejecución de Robespierre, para explicar los procesos en curso dentro del partido gobernante del Estado obrero soviético.

Lenin, en los meses que precedieron inmediatamente a la Revolución de Octubre, se dedicó a un estudio renovado de los escritos de Marx y Engels sobre la experiencia de la Comuna de París de 1871. De ese estudio surgió no solo una brillante contribución de Lenin a la erudición marxista, Estado y revolución, sino también la conquista del poder político por parte del Partido Bolchevique

90. Los marxistas no son meros ratones de biblioteca. Trotsky comentó una vez con sarcasmo sobre el académico que lee y reflexiona sobre el estado de la humanidad mientras se explora la nariz con el dedo. Los miembros del partido, ocupados en trabajo diario, no pueden darse el lujo de un tiempo ilimitado para dedicar a la lectura. Pero el tiempo del que se dispone debe ser utilizado, ante todo, para asimilar a fondo la historia del partido que luchan por construir, para aprender las lecciones de las experiencias históricas esenciales por las que ha pasado durante los años y décadas precedentes.

91. Por supuesto, la educación política de la generación más joven plantea problemas específicos. Primero, el entorno político general, bajo la influencia de la escuela de Fráncfort y el posmodernismo, es hostil al estudio de la historia. Los posmodernistas han proclamado la necesidad de abandonar el concepto de la verdad objetiva y el estudio de las llamadas “grandes narrativas”, con lo que entienden en general, la concepción materialista de la historia y, más concretamente, obras como El manifiesto comunista, El capital y, por supuesto, Historia de la Revolución rusa y La revolución traicionada de Trotsky. Para decirlo sin rodeos, esta es una era de mentiras, que son respaldadas por los académicos. Como lo ha expuesto la guerra en Ucrania y como lo ejemplifican los sinvergüenzas profesionales como Timothy Snyder, la distinción entre escribir historia y fabricar propaganda es ignorada por una parte sustancial de la comunidad académica.

92. Este ambiente reaccionario ha contribuido a un declive general en el nivel de conocimiento histórico. Para muchos miembros, su formación histórica comienza cuando se unen al Comité Internacional de la Cuarta Internacional.

93. Pero habiendo ingresado a una sección del Comité Internacional, ¿cómo van a asimilar los nuevos miembros la vasta experiencia del movimiento trotskista? Cuando mi generación se unió a la Workers League, poco más de medio siglo nos separaba de la Revolución de Octubre. La fundación de la Oposición de Izquierda en 1923 estuvo separada del mundo de 1970 o 1971 por solo 47 o 48 años, es decir, ¡el mismo tiempo que nos separa hoy de 1976! Nuestra educación se concentró en el estudio de los orígenes del movimiento trotskista, la fundación de la Cuarta Internacional, la histórica lucha entre facciones de 1939-40 contra la minoría pequeñoburguesa de Shachtman, Burnham y Abern, el desarrollo del revisionismo pablista que condujo a la publicación de la Carta Abierta y la escisión de 1953, y la subsiguiente lucha de los trotskistas británicos contra la reunificación. Por supuesto, existían muchas lagunas en nuestro conocimiento. Pero lo que estudiamos —los escritos disponibles de Trotsky y los principales documentos del Comité Internacional de la Cuarta Internacional— nos permitió llevar a cabo una lucha en defensa de la herencia teórica y programática del trotskismo contra la traición del WRP.

94. Extrajimos y tomamos todo lo que pudimos de la experiencia del movimiento marxista revolucionario. Recuerdo un episodio. A finales de octubre de 1985, reconocíamos que muchos miembros del WRP se habían incorporado al movimiento sin ningún conocimiento de la historia del Comité Internacional o incluso sin la conciencia de que eran parte de un movimiento internacional, y ellos no podían funcionar como cuadros trotskistas. No teníamos idea de sus simpatías políticas. Y así, el Comité Internacional propuso —en una reunión creo que fue el 25 de octubre de 1985— que todos los afiliados, aquellos que deseaban ser miembros del WRP, se reinscribieran sobre la base de una declaración explícita de que aceptaban la autoridad política del Comité Internacional. Banda y Slaughter se sintieron obligados a aceptar esa propuesta, que por cierto luego repudiaron. Banda se me acercó después de la reunión y me preguntó: “¿De dónde sacaste eso?”. Y le dije: “Mike, esa era una condición básica para ser miembro de la Internacional Comunista”. La admisión dependía de la aceptación de los 21 puntos de la Internacional Comunista. Fue con base en esto que buscaron combatir el reformismo y el centrismo de la Segunda Internacional. Banda se sorprendió. Probablemente, en ese punto de su degeneración política, había olvidado todas las lecciones de la Internacional Comunista.

95. Para nosotros, la experiencia del movimiento marxista revolucionario constituía la sustancia, el fundamento, de nuestra práctica. Había mucho que aprender cuando nos unimos al movimiento en la década de 1970. Pero estábamos intensamente dedicados a esa vasta experiencia. Recientemente me encontré con un documento que fue redactado por el Comité Central de la Workers League en noviembre de 1979, para honrar el centenario del nacimiento de León Trotsky, hace unos 44 años. Ese documento decía en un punto, lo siguiente:

La Unión Soviética era un régimen de transición, donde el capitalismo había sido derrocado pero el socialismo aún no se había construido, y donde la burocracia socavaba la lucha por el socialismo todos los días. El Estado obrero degenerado se enfrentaba a una alternativa entre avanzar hacia el socialismo a través del derrocamiento de la burocracia y extender la revolución, o restaurar el capitalismo a través de la contrarrevolución asistida por el estalinismo. Trotsky predijo y llamó a una revolución política para aplastar el estalinismo, defender la economía planificada y colocar a la Unión Soviética una vez más en el camino del socialismo. De esta perspectiva fundamental, nada —ni siquiera una coma— está sujeta a revisión.

Así es como nos sentíamos acerca de la historia del movimiento trotskista y su programa. Nada estaba sujeto a revisión, ni siquiera una coma. Podrías desarrollar el programa del movimiento trotskista. Podrías ampliarlo. Pero no toleraríamos ningún intento de cambiarlo, alterarlo y destruirlo. Y ese espíritu, que expresó, creo, el sentimiento y el espíritu de la Workers League en la década de 1970, no fue un factor pequeño en la determinación con la que se llevó a cabo la lucha contra los renegados del WRP en la década de 1980.

96. Han transcurrido casi cuatro decenios desde la ruptura con el WRP. Los orígenes y el desarrollo de esa lucha son ahora un elemento crítico de la experiencia histórica que debe ser estudiado y asimilado por los cuadros del Comité Internacional. Sí, camaradas, camaradas más jóvenes, hemos añadido mucho al programa de estudios que debe formar la base de su lista de lectura. Lo que puede ayudarles es el hecho de que los conflictos del período comprendido entre 1982 y hoy hacen referencia continuamente a la experiencia histórica antecedente del movimiento trotskista. Al leer esos documentos, al mismo tiempo estás repasando y aprendiendo de la experiencia de toda la historia del trotskismo. Por esa razón, el estudio de la historia del Comité Internacional es el fundamento esencial de la educación de los cuadros del Partido Mundial de la Revolución Socialista, y estamos convencidos de que el trabajo que llevaremos a cabo esta semana cumplirá un papel importante en el avance del nivel teórico de cada miembro de nuestro partido en los Estados Unidos e internacionalmente.

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